¿Cómo realizar la introducción de tu tesis?

La introducción de una tesis, ensayo o de un trabajo académico es una de las partes esenciales de un trabajo de investigación, para su elaboración deben seguirse ciertos pasos. A continuación, te explicaremos todo lo que necesitas para saber qué es y cómo hacer una introducción para tu tesis y que sea un total éxito. 

¿Qué es una introducción?

La introducción es considerada en cualquier trabajo, texto, investigación, ensayo, o tesis, como una de las partes más importantes de un escrito, ya que es el primer encuentro del lector ante el tema de estudio que se esté presentando. Es decir, se trata de familiarizar a la persona que lee con lo que se va a presentar a lo largo del trabajo.

Una introducción se sitúa luego de la portada, el resumen y el índice, lo que quiere decir que a través de ella se conocerá de qué se hablará. El texto debe ser lo más claro y explícito posible, de manera que atraiga al lector y éste desee seguir leyendo hasta el final.  

Para capturar la atención del lector, el redactor debe ser original y creativo cuando expone sus ideas. Por lo general en una introducción debe referirse el motivo que llevó al investigador a elegir su tema, al igual que un preámbulo sobre la metodología utilizada. 

La introducción, el desarrollo y la conclusión, son las tres partes fundamentales que conforman la “estructura” básica de la mayoría de proyectos o textos que se redactan a día de hoy. 

Características de una introducción

Una buena introducción posee las siguientes características:

• Es breve y brinda información general sobre el tema que se va a desarrollar.
• El planteamiento es ordenado y claro, de manera que se justifique su ejecución.
• Tiene un lenguaje apropiado, con términos de fácil comprensión. A menos que se traten de discursos científicos o especializados.
• Mantiene el mismo estilo gramatical que el resto del ensayo o discurso. 

Es importante entender que la introducción es un factor fundamental en tu tesis o proyecto de investigación. Si tienes dudas sobre cómo hacerla, no te preocupes, podemos explicarte con lujo y detalles a continuación. 

¿Cómo hacer una introducción?

Recordemos que una tesis es un trabajo de investigación, que se realiza comúnmente como requisito para obtener un grado académico. Tal es el caso de la introducción, ya que ella es la encargada de cautivar al lector y se interese en el contenido.

Si deseas elaborar correctamente una introducción para tu tesis, te presentamos una serie de pasos o sugerencias y así lograr el éxito:

• Debe responder a las posibles preguntas del lector: ofrece en tu discurso, preguntas al lector, para que éste se interese. Enfócalo en ¿qué se va a hablar?, ¿para qué?, ¿qué encontrarás?, ¿cómo? Si un texto permite al lector interactuar con el texto, generará confianza e interés en el lector.
• Definir el tema: no puedes iniciar una introducción sin saber exactamente sobre qué vas hablar. De hecho, los expertos sugieren que la introducción debe ser redactada al finalizar el trabajo de investigación. Esto se debe a que el texto puede tomar mejor forma y mostrar una visión final de su evolución.
• Tener precisión sobre qué tipo de lector va dirigido el tema: debes tener claro hacia qué quién escribes, sus objetivos, intereses y limitaciones. Partiendo de eso te será más sencillo saber qué tipo de vocabulario y tono utilizar. Recuerda que no es igual comunicar a un niño, a un adolescente o a un científico.
• Redactar de lo general a lo particular: organiza tus ideas empezando con la idea principal y luego ve desglosando las ideas secundarias.
• No debe ser extensa, pero sí llamativa: recuerda que una introducción busca informar sobre lo que se va a hablar en el texto. No puede ser muy extensa porque lograría aburrir y desinteresar al lector, trata más bien de que sea corta, pero precisa, tratando de resumir sin profundizar ningún aspecto, ya que esto será desarrollado en el cuerpo del trabajo.
• Despierta la curiosidad del lector: se sugiere crear una expectativa en el lector sin revelar mucho, dejando a la imaginación e interés del lector sobre lo que se pudiera encontrar en el texto.
• Aporta alguna información de interés: puedes investigar algún dato curioso y compartirlo en la introducción. Esto provocaría mayor expectativa en el lector.
• Cita a algún autor: puedes apoyar tu discurso con alguna frase de un personaje conocido o algún aporte que haya hecho un autor. Al hacer esto, daría mayor credibilidad a tu investigación.

La introducción de un trabajo académico debe ser eficiente porque cuenta con la compleja tarea de seducir al lector a adentrarse aún más en tu escrito. 

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